lunes, 26 de febrero de 2018

XI Los 35 Años de la CVG


Nuevos Retos

La Realidad de un Mito

La CVG arriba -29 de diciembre- a los 35 años de su creación, tres dece­nios y medio durante los cuales se cumplió todo un proceso para sacar a flote la realidad de lo que pareció por mucho tiempo un mito, una leyen­da a punto de convertirse en tradición, la tradición de que Guayana, pro­vincia tomada por Antonio de Berrio hace cuatro centurias, no abrigaba en su seno la codiciada y dorada Manoa, sino ríos y selvas hostiles custo­diados por primitivos habitantes todavía en la edad de piedra.
Los conquistadores y colonizadores no llegaron a descifrar los códigos de ese mito, aunque hicieron una aproximación a partir de la Expedición de Límites. Ha sido en tiempos de la República cuando el mito comenzó a despejarse: La Ciudad de la dorada Manoa era posible, pero había que construirla con la fuerza de sus propios ríos y con los metales subyacen­tes en los extensos y eminentes espacios de su geografía.
Tocó al Estado venezolano a través de la Corporación de Guayana (CVG) coronar todo ese esfuerzo secular del hombre en procura de riqueza y bienestar, con una prospección y cuantificación a fondo los recursos na­turales de la región, seguidos de una planificación y programación de desarrollo que se ha venido ejecutando con aportes sustanciosos de la renta petrolera y créditos foráneos que conforman una deuda incompati­ble con la actual capacidad financiera del estado venezolano.
La deuda alcanza a los 400 mil millones de bolívares representada en una gran infraestructura en plena producción, pero agravada por una tecno­logía que ya resulta obsoleta para competir en el mercado internacional. De suerte que tal realidad ha llevado al estado venezolano, propietario del complejo industrial en los sectores hierro y acero, energía, aluminio, oro, forestal e inversiones minoritarias en otras actividades productivas, a practicar una revisión de la misión estatista de la CVG en cuanto a crecimiento y desarrollo económico.
Los resultados de la revisión de esta misión encuentran que "existe un agotamiento de la estrategia de desarrollo basada en el uso intensivo de la renta petrolera y el endeudamiento externo, conjuntamente con la exis‑
tencia de nuevas tendencias mundiales, en cuanto a cambios tecnológi­cos, globalización y apertura económica y comercial". En consecuen­cia, se plantea la necesidad perentoria, ya en ejecución, de modificar significativamente el papel preponderante estatista de la CVG como pro­ductor directo y regulador de la actividad productiva.
Con ciertas salvedades en el caso de Edelca, Ferrominera y Minervén, el sector privado ha sido llamado para liderizar las empresas industriales de Guayana, urgidas de nuevas tecnologías que las haga competitivas y de financiamiento que por incapacidad presupuestaria no puede cubrir el estado.
La CVG, sin quedar totalmente desvinculada del capital societario de las empresas, asumirá un papel más cónsono con los principios que le dieron origen, fundamentalmente con aquellos que le asignan el rol de promotora del desarrollo, estimulando el uso del potencial económico de Guayana. Para la dirección y control de las empresas exentas del predominio del capital privado, se crearán dos empresas "holding": una industrial y otra minera del oro y diamante.
En esta forma, la CVG mantendrá su condición de Instituto Autónomo que le otorga el Estatuto Orgánico y su Reglamento Interno, pero con una estructura organizativa, funcionalmente menos compleja, en todo caso, con capacidad suficiente para ejercer a cabalidad, entre otras, las labores de planificación, promoción y control de gestión.

Pudiéramos terminar diciendo al cerrar este capitulo que el mito de El Dorado que hace 400 años tomó cuerpo en esta porción geográfica de Venezuela, ha quedado atrás como desideratum dificil de hacer realidad. Hoy el mito es una realidad. El tiempo, la constancia, el esfuerzo, la madurez y renovación del ingenio del hombre lo han hecho posible y se ha avanzado en 35 años en la compleja y organizada tarea de aprovecha­miento, sólo que hay que descifrar ciertos códigos que ayer fue de una manera y hoy podría ser de otra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario